Estamos jugando a las escondidas en el gran patio de la vida, buscando lo único quehemos perdido, es este gran juego en el que estamos todos siendo participes, aunquealgunos sin saberlo.
Pero a diferencia de cuando éramos niños, aquí no se trata deencontrar el escondite de nuestros escurridizos compañeros de juego.
Tampoco escontar en la pared hasta cien mientras ellos se escabullen en los rincones de nuestra casa.
No se trata de salir y descubrirlos uno por uno antes que logren tocar la pared enla que comenzó el juego. Este juego es diferente pues esencialmente toda la búsquedasurge y transcurre a lo largo de nuestra vida.Y sólo buscamos lo que irónicamente no para de perseguirnos, pues nos buscamos anosotros mismos, ya que en este juego, en el que te introducirás a través de laspaginas que siguen, hay alguien que trata de esconderse
de ti….
El juego al que te estoy invitando tiene simples axiomas:
-no debes contar hasta cien
-no debes encontrar a nadie fuera, en el gran patio de juegos de la vida
-no debes cuidar tu pared de manos ajenas
-hay sólo una persona que se ha escondido de ti
-el lugar donde debes hallarla está tan cerca que rara vez la buscarías en él
-tu y tu adversario en el juego, se parecen bastante-todos los demás participantes sólo están siendo espejos para que halles al único quepuede ganarte la partida
-el juego te da casi 100 años de tiempo
-pierde el que no encuentra, gana, el que descubre la escondite y al que yace escondido
Simples reglas, de un aparente muy simple juego. Pero un ultimo detalle y quizás un o
muy importante:
-Cuando nace el jugador nace la escondite y en ella el escondido, pero el juego
comienza y la trampa es que la memoria del jugador es borrada, no recuerdas nada,así se vuelve difícil reconocer el escondite, y mas aun a quien se ha ocultado en ella.Para eso éstas paginas, para que recuerdes que estás en este juego porque hasta eso
has olvidado…
Ésta es la única tarea que vale la pena emprender, es la sublime tarea que se inicia
cuando nacemos a la vida, pues a través de muchos patios de juegos lo hemos yaintentado, pero siempre este desmemoriado jugador, cuando ingresa a uno de ellospor primera vez, pareciera olvidar toda búsqueda anterior.
Cuando comienza este hermoso juego, este viaje, ésta nueva oportunidad, se vuelve
difícil jugar, pues pareciera que eso de buscarse a uno mismo siempre es mas aburridoque hacerlo con los demás participantes de este juego, pero lo irónico es que en ellossólo hallaras pistas que te deberían llevar a desenmascarar al escondido que hasolvidado, pues caminaras como sonámbulo mientras no lo halles, descubre así quien
es….pues sólo para eso ha comenzado el juego….
Camina, busca.
Busca el verdadero tesoro, cuando lo encuentres todo lo demás se
desplegara ante ti….
Del libro... VOLVIENDO A MIRAR.... una invitacion a re-encontrarse
DE JORGE E FABRICIUS
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